Fuga numero Dos
El Tiempo me robó los trenes
el té del jueves con Yaya*
y también
la playa.
No se trata de nostalgias
o dramáticas recordaciones,
apenas no sé como hace
para aguantérsela, elTiempo,
después de conocerlo
está siempre retirándose
o entonces
nos va llevando.
De a poco nos va sacando
lo que cargamos a gusto
como una aduana imbatible
que nos revisa hasta el alma.
Yo le discuto y lo exprimo
y trato de ahogar los minutos.
Rompo relojes
atraso
cómo despacio
y lo dejo.
A veces cuando resgato
lo que me queda
o que aún tengo
sé que al final
también pasa
porque su dueño
es el Tiempo.
Y entonces quiero venganza.
Me junto al mundo;
reniego.
Trabajo en doble,
olvido sueños.
Porque los sueños son hechos
en su mitad
por el Tiempo.
Así también es el mar
de aquella playa
y los trenes.
Y algún lugar donde es jueves
y aún tomo té
con mi Yaya.
* Yaya: apelido da minha avó.
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